Su cometido es la profundización sobre nuestro Carisma, promoviendo jornadas de reflexión sobre temas que nos ayuden a mantener actualizado el contenido teológico-bíblico del mismo, de modo que vivamos según él, lo custodiemos en fidelidad, lo hagamos más profundo y lo desarrollemos constantemente, en línea con las actuales directrices de la Iglesia.