Hoy 8 de enero se me encomendó, en lo personal, la difícil tarea de escribir mi experiencia de ingreso al Postulantado, que es la primera etapa en el proceso de formación que estoy viviendo en la Congregación de Hermanas Carmelitas Teresas de San José.
El día de ayer, domingo 7 de enero, en la Comunidad de las Hermanas en Chillán se celebró, a eso de las 11:30 de la mañana, la celebración de entrada al Postulantado, la cual viví con mucha alegría y rodeada del cariño de las Hermanas que de Santiago pudieron viajar, y por supuesto, de las Hermanas de la Comunidad de Chillán y de mi familia. Luego tuvimos la eucaristía de la epifanía del Señor donde las Hermanas hicieron renovación de sus votos, y terminamos la celebración con un almuerzo en ese ambiente de alegría y de fiesta.
Para mí, el dar este paso, es un hecho muy importante ya que significa un compromiso más serio con Dios y con la Congregación. Este paso es el segundo más radical que doy por decisión propia, la primera fue en marzo del año recién pasado, cuando deje a padre y madre para entrar al Aspirantado e ir a vivir con las Hermanas en Santiago.
Todo este tiempo ha sido un proceso de re- descubrimiento personal y de re-encuentro conmigo, pero también de una manera muy fuerte con Dios. Un Dios que se ha ido transformando y haciendo más cercano, sólo por obra de la oración y gracia del Señor, en donde he ido aprendiendo a escucharle de a poquito y así poder estar más dispuesta a hacer su voluntad.
Natalia Navarrete, postulante