El día 27 de enero, hemos centrado la jornada entorno a las mesas de diálogo, es
decir, un ambiente y un lugar determinado entre laicos y religiosas para conversar y
escuchar con un propósito concreto.
Estas mesas las hemos estado meditando individualmente, para luego exponerlas
en nuestro equipo heterogéneo (uno de los seis equipos de estos días) y llegar a
algunas conclusiones conjuntas. Posteriormente, hemos estado uniendo los equipos
de dos en dos, de manera que solo quedaron tres grandes equipos en los que seguir
hablando y llegando a acuerdos.
Finalmente, de cada gran equipo han sido escogidas dos personas. Es decir, que
entre los tres grupos han sido escogidos seis asambleístas que han conversado y
negociado para elaborar un documento final sobre dichas mesas de diálogo, que se
ha presentado a todos los asambleístas.
Como es habitual, por la noche hemos tenido una sesión de recreación. Esta vez
preparada y promocionada por la delegación de México con: rancheras, bailes,
juegos, gastronomía y vestimenta típica de dicho país.