Del 17 al 19 de febrero, el equipo de pastoral de la Provincia Nuestra Señora de la Altagracia, llevó a cabo la convivencia vocacional en la casa Hogar Teresa Toda de Azua.
Está experiencia fue para las jóvenes un espacio que facilitó la reflexión, sobre la pedagogía del amor vivida por las dos Teresas. La misma va de la mano, con la paciencia, ternura y entrega desinteresada de cada unas de nuestras hermanas y laicos a favor de nuestras niñas del hogar.
Por ende, el tema trabajado de estos días, no se quedó en palabras, sino que lo vivieron al compartir con cada una de las niñas quienes a pesar de su realidad viven con mucha alegría, porque se sienten amadas y aceptadas e hijas de la Hnas. Carmelitas Teresas de San José.
Los espacios de oración personal, les condujo a reflexionar sobre la llamada que Dios hizo a las Teresas y a estar atentas a descubrir las insinuaciones del Espíritu en sus vidas.
También, se trabajó en grupo el tema de la vida y misión de las dos Teresas, el cual se presentó a través de sociodramas, cantos, bailes y poemas, donde se manifestó una gran integración de parte de las niñas y las jóvenes.
Al final del día se celebró la Eucaristía presidida por el padre Dubán, en acción de gracias a Dios, donde se oró de manera especial, por el aumento de vocaciones para nuestra Iglesia y para la Congregación. El sacerdote invitó a las jóvenes a descubrir la llamada que Dios les hace.
Finalmente, fue una oportunidad para palpar la ternura de Dios, que invita a vivir desde el ser Madres, Maestras y Amigas, a ejemplo de Jesús, que en su Palabra nos dice: ¨Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis, porque de los que son como estos es el reino de Dios¨. (Lucas 18:16).
Hna. Carmen Luisa Jiménez, ctsj