Queremos compartir con ustedes la experiencia que hemos tenido las Hermanas que, después de los cinco años de votos perpetuos, estamos participando del encuentro de finalización del quinquenio.
Del 2 al 3 de diciembre fuimos llegando algunas Hermanas a la casa de Delegación Nuestra Señora de Guadalupe. Las Hermanas de esta comunidad nos dieron una calurosa bienvenida haciéndonos sentir en casa y en familia, que agradecemos con todo el corazón. Conformamos el grupo las siguiente Hermanas:
Judith Blanco Rodríguez, Provincia Santa Teresa
Carmen Jiménez Peñaló, Provincia Ntra. Sra. de la Altagracia
Rosmeri Al. Gutiérrez Beato, Provincia Ntra. Sra. de la Altagracia
Dioselina Tabares Suaza, Provincia Ntra. Sra. del Carmen
Ángela Sánchez Moreno, Delegación Ntra. Sra. de Guadalupe
Patricia Moyolt Xochitecalt, Delegación Ntra. Sra. de Guadalupe
Rosa Nelly Pérez Hernández, Delegación Ntra. Sra. de Guadalupe
Esmeralda Blanco Rodríguez, Delegación Ntra. Sra. de Guadalupe
Patricia Jiménez Espinosa, Casas Generalicias. Costa de Marfil
Acompañadas por la Hna. Carmen María Ugidos, delegada general de Formación.
El día domingo 4 de diciembre disfrutamos de un recorrido por las pirámides de la Ciudad Prehispánica de Teotihuacán, que fue uno de los centros urbanos más grandes del mundo antiguo que llegó a concentrar una población mayor a los cien mil habitantes en su momento de máximo esplendor.
La semana del 5 al 12, hemos llevado a cabo el primer núcleo, titulado: Fortalecimiento de vínculos y adentramiento personal, un acercamiento a la realidad de nuestros países, sus dolores, gozos y esperanzas; así mismo también hemos estado compartiendo vida, misión en nuestro seguimiento de Jesús, finalizando con un encuentro inter-comunitario con las Hermanas de Querétaro con quienes compartimos el fin de semana. Dimos un recorrido por el centro histórico de la Ciudad, y por el pueblo mágico de Tequis.
El día 12 de diciembre oramos en torno a Nuestra Santísima Madre, la Virgen de Guadalupe uniéndonos a nuestro pueblo mexicano que, con tanta fe y devoción, ha peregrinado a los distintos santuarios dedicados a ella y especialmente al Tepeyac.
Agradecemos sus oraciones y nos seguimos encomendado a ellas. Que el Señor haga surgir los frutos en cada una de nosotras, para seguir apostando por Él y su Reino.
En nombre del grupo y en el mío propio, fraternalmente,
Hna. Esmeralda María Blanco Rodríguez, ctsj